La inigualable Sarah Burton, quien fue la mano derecha del extraordinario McQueen hasta 2010 y se convirtió en directora creativa a causa del suicidio que cometió el diseñador; ha decidido abandonar la casa de lujo británica, llevando consigo casi tres décadas de estrechas relaciones.
Sarah entro al escalofriante Mcqueen en 1997, como asistente de tiempo de completo para el fallecido Lee. Con tan solo tres años adentro, fue nombrada como jefa de diseño para la linea femenina. Elogiada como la perfecta sucesora de Alexander, siguió los pasos de su maestro, hechizando con graduales cambios en la confección, respetando el legado y balanceando las fantasías de carácter Haute Couture. Uno de sus mayores logros fue crear el vestido de novia para Kate Middleton en 2011. Esto, instauro una vigorosa relación con la Duquesa.
«Estoy orgullosa de lo que hecho y de mi equipo en Alexander McQueen. Son mi familia y esta ha sido mi casa por más de 26 años». «Quiero agradecer a François – Henri Pinault por creer en mi y ofrecerme esta increíble oportunidad. Sobretodo, quiero decir gracias a Lee Alexander McQueen. El me enseño demasiado y estoy eternamente agradecida con él. Ahora en mi futuro y siguiente capítulo, siempre traeré conmigo este preciado tiempo» – declaró Sarah Burton en un comunicado de prensa.
Con los sutiles cambios que ha ejercido el grupo Kering (AM pertenece a este grupo desde 2001) el CEO François – Henri Pinault manifestó lo siguiente: «Estoy inmensamente agradecido con Sarah … A través de su experiencia, sensibilidad y talento, continuo envolviendo su expresión artística en esta casa. Ella mantuvo y prosiguió con el legado McQueen, atención al detalle y única visión, añadió un estilo personal singular».
Su colección spring – summer 2024 que se presentará en París, será su definitivo adiós.
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