Alumnos de la Universidad del Caribe (Unicaribe) organizaron una asamblea estudiantil sin precedentes en el Auditorio “G” para visibilizar las problemáticas que afectan su vida académica y seguridad. Con una encuesta previa que reunió la voz de 800 estudiantes (de casi 4 mil), expusieron fallas críticas como infraestructura en mal estado, sistemas informáticos obsoletos —como Sigma, vital para inscripciones—, inseguridad en estacionamientos, contaminación del estanque artificial y un transporte público deficiente. Luis Alejandro Méndez Jiménez, estudiante de Ingeniería en Logística, destacó que este movimiento busca soluciones concretas, no confrontación: “La rectora nos escuchó y no habrá sanciones. Esto es diálogo”.
Tras la asamblea, se elaborará un documento oficial con todas las exigencias estudiantiles para entregar a la rectora Marisol Venegas. Entre los avances inmediatos, la universidad ya actuó en problemas como la contaminación del estanque, la renovación parcial de equipos de cómputo y ajustes en el estacionamiento. Sin embargo, Venegas Pérez aclaró que el enfoque no es resolver cada queja de forma aislada, sino alinear acciones con el Plan de Desarrollo 2030 de la institución: “Los representantes estudiantiles conocen la estrategia y colaboran en las soluciones”, afirmó.
El movimiento surgió tras un mes de quejas anónimas publicadas en redes, pero los líderes estudiantiles optaron por la vía institucional. Méndez Jiménez recalcó que el diálogo con las autoridades ha sido clave: “La universidad nos apoyó con espacios y respeto”. Aunque persisten retos como la modernización de Sigma y la ampliación de estacionamientos, este ejercicio marca un precedente en la participación juvenil para transformar su entorno educativo.
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